|
Marie-José: se lo quitaron todo.
|
|
A principios de mes, Sari Bermúdez, titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México,
declaró a la prensa mexicana que la Fundación Octavio Paz, en la persona de la viuda del poeta, Marie
José Paz ("mujer a la que admiramos profundamente", matizó Bermúdez), cuenta ya con un edificio
para emplearlo como sede. Sin embargo, este 5 de agosto Paz desmintió a Bermúdez en un comunicado enviado
a la prensa.
"Me han quitado todo", aclaró la viuda del autor de El laberinto de la soledad.
Además de refutar las afirmaciones de la funcionaria, Paz adelanta la posibilidad de crear un "consejo
internacional, en Estados Unidos o Europa" para salvaguardar la memoria y el acervo del poeta mexicano,
y anunció que el Premio Octavio Paz de Ensayo y Poesía será dado a conocer en noviembre, auspiciado por
la Asociación Amigos de Octavio Paz al igual que el año pasado.
Paz falleció en 1998 en la Casa de Alvarado, en Coyoacán. Dicho inmueble albergó a la Fundación
Octavio Paz, creada en 1997 por iniciativa del presidente Ernesto Zedillo, pero ahora se convertirá en la
sede de la Fonoteca Nacional. Sin embargo, concluido el sexenio de Zedillo, ahora a Vicente Fox parece no
importarle el legado del poeta, lamenta su viuda: "Me parece que México tiene una deuda con Octavio
Paz, pero quizá los encargados de las instituciones culturales no piensan así".
Una vez disuelta la institución, en mayo de 2003, por desacuerdos entre Marie José y el patronato, la
casa fue devuelta al gobierno. La ruptura dio origen a la Fundación para las Letras Mexicanas, mientras que
Marie José Paz anunció la reinstauración de la que llevaba el nombre de su esposo.
Fue justamente en la Casa de Alvarado donde, tras una ceremonia en la que se evocó una y otra vez la
figura de Paz para anunciar la creación de la Fonoteca Nacional, Bermúdez afirmó que "después de
que desapareció la fundación, ella buscó una casa particular y encontró un edificio para albergar su
nueva institución. Le tenemos mucho respeto. Es una mujer a la que siempre ayudaremos, porque tiene uno de
los tesoros más grandes de la nación: la obra de nuestro gran poeta Octavio Paz".
En respuesta, Paz sostiene que no cuenta con ninguna sede para la fundación, ni recursos para ese
proyecto. "Unicamente he recibido vagas promesas. He esperado en vano con paciencia, discreción y
cortesía una respuesta positiva a mi llamado conciliatorio pero nada se ha hecho realidad. Y como no he
tenido eco a ese llamado, he pensado seriamente crear un consejo internacional, en Estados Unidos o en
Europa, para guardar su memoria y su acervo".
Y añade: "no sé, por lo demás, cómo se puede derogar, de la noche a la mañana, un decreto
presidencial que dio origen a la Fundación (...). Siento que en vez de halagar la imagen del poeta, que
tanto utilizan en el extranjero, le han infligido un castigo".