Poemas
Georgina Wilson González
Dureza
Mereces que te diga lo mucho que te quiero
Y que agradezca todo tu amor y tu ternura
Has sido siempre dulce, siempre bueno y sincero,
yo, en cambio, no te ofrezco más que mi parte dura.
Perdóname, amor mío, si no siempre te aclaro
que te sigo queriendo, que estoy muy bien contigo.
Yo soy muy pensativa, de veras, no es tan raro
que a veces me distraiga cuando tú estés conmigo.
Somos muy diferentes, pero es mejor así:
compensas mi dureza, me llenas de alegría
Tú me haces muy feliz, y creo que yo a ti,
aunque debo admitir que a veces soy muy fría.
Pero mi amor no cambia, te quiero de aquí al cielo
contar con tu cariño me hace ser muy dichosa.
No me hace falta más, y siempre es un consuelo
saber que me comprendes, incluso en esas cosas.
Renovaciones
Hoy puse en un rincón a la güera preciosa
la dejé limpiecita y muy bien afinada
pero a pesar de todo me mira rencorosa
se queda toda triste, se sabe abandonada.
Pobre guitarra güera, ¿ella qué culpa tiene?
La güera fue un regalo que alguna vez me diste
y yo la quiero tanto, pero no me conviene
cantar sólo con ella: siempre me pone triste.
Ya una morena tímida espera a que la afine
empiezo a conocerla, oigo su voz profunda
¿quién sabe cuántos cantos conmigo ella camine?
¿quién sabe cuántos tonos descubriremos juntas?
La güera me perdona, y a mi guitarra nueva
aprenderé a quererla, así como he logrado
dejar ya de quererte. Quizá con ella pueda
resanar con canciones las grietas que has dejado.